Pies, ¿para qué los quiero si tengo alas para volar? F. Khalo.
miércoles, 24 de junio de 2015
TODOS TENEMOS
UN DIOS,
UN AMOR
Y UNA RAZÓN.
Soltar. Dejar ir, todo aquello que nos carcome hasta los huesos, hace silencio en el alma. Trascender, evolucionar, aprender y avanzar.
Cenizas
Exhalo el humo de mi cigarrillo que se consume indefectiblemente,
y con él, mi tiempo.
Porque el fuego no sabe de esperas.
Arde.
Quema.
Arrasa.
Engulle.
Y al final?
Nada queda.Solo cenizas.
martes, 23 de junio de 2015
Y si de culpar a alguien se trata, hacele un ring a Freud que en un sms te escribe : "Fue tu madre!".Y claro, eso me ha sucedido. Porque a menudo encuentro a mi madre en mis formas de actuar o de hablar, y es ahí, donde pienso que por mas que nos esforcemos en intentar no repetirlas, adivinen que amigos? es inevitable. Y he aquí lo indefectible de tal cuestión: son marcas con las que cargaremos de por vida. Asi que prendete un habano, y fuma tranquila.
La vieja de Mier... Cumplís 23 y te das cuenta que ya estas grande para ciertas cosas, y nunca falta esa amiga de tu abuela o esa tía abuela segunda o la vecina de tu edificio, que no escatiman en quejas y mucho menos en tirar comentarios malintencionados que internamente te sublevan, como ¿"para cuando el novio nena?" o ¿cuando pensas recibirte?, o "estas mas gordita", asi como tampoco nunca faltan las comparaciones: "mi nieta estudia 3 carreras al mismo tiempo". Pero mantenes la calma para no ser grosera y soltas una sonrisa, muy al estilo Mona Lisa, intentando que entre dientes no se te escape un "vieja de mier... ni un comentario sobre la "santa" nieta. La cuestión es que la Vieja de mier... llego para quedarse, y no es una cuestión de edad, sino de actitud. Así que cuida tus comentarios o actitudes poequea los 23 también podes ser una vieja de mier...
La mujer que calla, la sometida, la temerosa, la obediente, la que baja la mirada, la que pide permiso para hablar y perdón por opinar, la puta, la que es violada porque provoca y asesinada porque "algo habrá hecho". Esta es la mirada patriarcal de la cultura que nos atraviesa cual flecha que quiere ser arrancada, pero duele y sangra. Sigamos luchando.
Re-presión.
Muerdo el anzuelo.
Me desgarro y sangro.
Amnesia para vivir sin rencores.
Huyo del dolor. Escondo la herida. Olvido.
Ya no duele, pero permanece. Y a veces, desde el fondo, sabe como hacerse oír.